Israel está bombardeando intencionadamente en la Franja de Gaza barrios residenciales, escuelas, campos de refugiados, hospitales y ambulancias. El fiscal de la Corte Penal Internacional ha abierto investigaciones por crímenes de guerra y organizaciones de derechos humanos y agencias de Naciones Unidas urgen a que la comunidad internacional tome medidas urgentes para detener esta masacre. Solo entre el 7 de octubre y el 27 de noviembre de 2023 han sido asesinadas en Gaza más de 20.000 personas, entre ellas al menos 8.000 niños y niñas. Save the Children denuncia que ha habido más muertes infantiles en la Franja de Gaza en solo tres semanas que en todas las zonas de conflicto del mundo desde 2019.
Según esta organización, un niño muere cada 10 minutos en Gaza.
Expertos de Naciones Unidas alertan de que lo que está pasando a día de hoy en Gaza podría ser un genocidio e instan a los gobiernos a pasar a la acción afirmado que «los aliados de Israel también tienen responsabilidad y deben actuar ahora para impedir su desastroso curso de acción (…) todas las partes deben cumplir sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos.»
Es importante entender este embargo de armas de manera bidireccional, es decir, es necesario prohibir tanto la venta como la compra de armamento y tecnología de seguridad a Israel. España compra muchas más armas a Israel de las que vende. Israel usa Palestina, sobre todo la Franja de Gaza, como campo de experimentación para testar nuevas armas y métodos de represión que luego exporta para ser usados contra población civil alrededor del mundo. Estos productos se publicitan como “probados en combate” y esto se ha convertido en un valor añadido en el mercado de la seguridad y la defensa internacional. La marca “probado en combate” que Israel promociona, hace referencia a productos que se han probado sobre población civil palestina. Un genocidio debería rendir cuentas y no beneficios económicos.

Por todos estos motivos, le exigimos al Gobierno de España el fin inmediato del comercio militar y de seguridad con Israel.